¡Abajo los narradores deportivos!

Hay que admitirlo todos estamos contagiados de la fiebre mundialista, hasta yo que soy un cerdo en el fútbol y lo único que se dar en una cancha son patadas en la espinilla de mi contrincantes y que odio un poco los campeonatos locales, pero con el mundial he gritado cuando Uruguay le da en el palo o cuando Suiza le ganó a España, también admito que envidio enormemente a los que están disfrutando de cada partido y están gastando sus ahorros en Sudafrica. A los que no puedo envidiar y que en ocasiones me pregunto "¿Que carajos hacen esos señores allá?" es a los narradores deportivos, abominables seres que gritan, dicen grandiosas y coherentes frases (más pensadas y meditadas que este blog) pero que finalmente no comprendo y muchas veces mi malcriado y malpensante cerebro saca conclusiones desastrosas.

Esta claro, no se nada de fútbol, nada, no se cuando es fuera de lugar, no se por que Honduras está en el mundial, no sé Maradona por que es director técnico, por que William Vinasco "Che" narra con caché y por que Jorge Eliecer Torres tiene sonrisa de muppet cada vez que ante cámara, debo reconocer que las voces de estos dos personajes no las soporto, ¿quien le dijo a los productores que hay que hablar como una abuela desesperada para narrar un partido? ¡quien! ellos no le ponen emoción a nada, yo prefiero que se queden callados y no contando toooooooodo absolutamente todo lo que se cruza por la pantalla ¿acaso para eso no están mis ojitos? es como ir a un museo y que el guía te diga "estamos caminando por un corredor amplio, con 5 lamparas, un piso blanco y liso, paredes verdes" para finalmente llegar a la parte que necesitamos que es "esa es una pintura de Picasso" por eso es que nuestros cerebros todavía están envueltos en una especie de lagaña, por la television, especialmente esos super narradores y comentaristas deportivos nos mastican y licuan la comida y luego nos obligan a tomarla; lo peor es que me niego a utilizar el "mute" para ver el partido, por que finalmente debo alimentar mi odio hacia algo o alguien y esos despreciables seres se han ganado el mio,lo seguiré haciendo los seguiré escuchando y viendo para que mi corazón lata más fuerte lleno de profunda ira y que sienta una ganas enormes de tirar el televisor por la ventana, no pretendo que narren como lo hacen los verdaderos periodistas deportivos de ESPN o FOX SPORTS pero que si lo hagan más consientes, menos acelerados y con una mejor voz; aquí va algo que escuché en el partido Brasil-Costa de Marfil (admito que tome nota y que mis hermanos y yo pusimos cara de asterisco cuando el man lo dijo) "Elano,Elano, pica Elano, pica pica pica Elano" (querido lector no se preocupe por lo que pasó por su mente, la mía también lo sufrió).

En fin en algún momento debo canalizar esa ira para cosas buenas, espero no terminar sin televisor al ver al insoportable Carlos Antonio Velez diciendo "no me gusta, no me gusta, no me gusta" si no le gusta vayase más bien, pa' que trabaja en eso, o vuelvase director técnico o más bien sea televidente que le queda más facil y se compromete menos, pero bueno de alguna manera ellos hacen su trabajo, bien o mal pero lo hacen y finalmente su razon de vivir es sacarme la piedra, espero que una tribu de caníbales no los encuentre en África y los devore, por que aparte de Claudia Gurisatti y Jaime Bayly ellos son los únicos que acaban con paciencia, les digo de corazón ¡¡¡LOS AMO!!!

Como olvidar la cara de Jorge Eliecer Torres en el mundial de Alemania, parecia que era la primera vez que salía de paseo y la de William Vinasco mercando con caché en ALKOSTO, "no me diga más cabellero no me diga más".

¡Que vuelva el ayudante!

Últimamente me he visto obligado a tomar buses temprano en la mañana, o madrugada no sé pero es muy temprano y sé que a esa hora la gente aún tiene la cobija caliente, bueno no todos por algunos como yo nos disponemos a tomar buses para ir a la casa y otros se disponen a ir a su trabajo lagañosos y con el pelo mojado, admito que odio los buses, no me gusta el transporte público, alegar cuando el busero no para o cuando esta decidido a embutirle gente al hermoso vehículo a como de lugar, dejando imposibilitados a algunos a respirar, a moverse, a parpadear; han sido días trágicos y grises ver pasar mi vida montado en bus y me he llegado a preguntar ¿cuanto tiempo perdemos montando bus? ¿cuando harán la teletransportación que aprendió Gokú? o ¿cuando nos vamos a transportar en ascensores como en futurama? o peor aún ¡cuando me compraré un carro!.
La madrugada del sábado mi cerebro estaba dispuesto a recibir cualquier tipo de información y usarla a su favor, y no pasarse el recorrido haciéndose preguntas sobre el futuro incierto, así que el destino me preparó uno de mis mejores viajes en bus, nunca me había reído así y creo que los pasajeros de ese bus nunca habían visto a alguien con una sonrisa tan estúpida tan temprano en la madrugada. Cuando le puse la mano al bus y vi desde afuera que habían pocos pasajeros dije "¡Oh! que maravilla un bus solo para mí" así que sonreí y saque las moneditas para pagar, cuando puse el pie en los escalones del bus me dí cuenta que era especial y me empecé a reír, pagué, miré las entrañas del bus y quedé feliz viendo la iluminación a una señora gorda dormida en una de las primeras bancas, pero la luz era increíble, era toda roja roja roja y en el techo había una imagen del corazón de Jesús era un bus tan cálido y tan vacío era tan perfecto que no importaba en olor a chocolate caliente y a huevo revuelto con arepa que impregnaba el lugar. El recorrido iba avanzando y el bus se iba llenando de a poco, no había ayudante algo extraño en los buses en una de las paradas se montó un señor, que por su cara y las lagañas que tenía no había dormido muy bien y necesitaba un puesto a toda costa, vio uno al final del pasillo pero no lo alcanzó, una señora fue mucho más rápida que el, así que decidió sentarse en una banquita estrecha ocupado por un señor pasado de peso, se abrió paso desesperadamente en ese sitio y quedo aprisionado entre la ventana y el brazo del señor, su cara era increíble por que era como de placer estrecho, como un lo logré pero estoy tan estrecho, solté la carcajada y el señor solo sonreía un poco asfixiado pero se mantuvo vivo durante el recorrido.

El bus se fue llenando y ya no era ese paraíso rojo que había visto cuando me monté, ahora estaba lleno de gente con el pelo mojado que le daba un olor a pie sudado a todo el bus, y ese olorcito de huevo caliente ahora se mezclaba con el de pelo mojado y la combinación no era mi favorita, justo en ese momento me dí cuenta de la importancia del ayudante, el bus se iba llenando y señor chofer solo atinaba a decir " madrecita me colabora y se ubica en la parte de atrás, amigo en la parte de atrás, joven en la parte de atrás" yo quería gritarle ¡señor la parte de atrás esta llena, mejor dicho el bus esta lleno! pero el se empeñaba en embutirle más gente, yo me sentía atrapado como en un chorizo, aunque estaba sentado y solo me reía de la cara tallada de algunos pasajeros y ver como se dormían ahí parados, llego un momento en que el chofer se sintió tan desesperado que paro el bus y grito "se me ubican pues o se bajan de esta vaina" y el pueblo le dijo "entonces devuelvame el pasaje" y el malvado conductor de calmo y siguió su camino yo sabía que si el pueblo se revelaba el tenía que seguir su recorrido, y efectivamente lo hizo. Mi recorrido ya iba terminando y tenía que salir de alguna forma del tumulto y parece que lo hice con broche de oro, a mi 20 años no tengo control sobre mis 1,83 de estatura, me pare de mi puesto, vi la manera de salir y plop me caí sobre mi compañero de puesto que dormía placidamente con la boca abierta y babeaba su hombro, yo solo atine a decir "que pena" y el a seguir durmiendo, a medida que me alejaba me di cuenta como todos los que estaban a mi alrededor peleaban por mi silla aún caliente y yo tenía que salir sano y salvo de ese bus, ¿o que le iban a decir a mi madre si no llego salvo a casa?. Hoy me tengo que volver a montar a un bus, no sé hasta cuando aguantaré el ritmo, es más no creo que volveré a soportar un bus sin ayudante.

Señor ayudante si esta leyendo esto, por favor nunca abandone su trabajo que es indispensable, por favor regrese pronto y lo trataré mejor, no importa si me cobra de más, o me dice "eche pal fondo" no me importa, pero no nos abandone, ¡¡el pueblo lo necesita!!!

¡¡Me quiero ir a vivir a Haití!!

Hace mucho rato he buscado la manera de salir del país y justo cuando estoy a punto de hacerlo hay algo que me dice "no rey espere otro ratico" y pues bueno de ratico en ratico me fui quedando. Desde hace unos tres meses dije convencido "me quedaré en Colombia" no solo por que habían una serie de eventos afortunados alrededor, sino también por que el panorama político iba a cambiar, así que corría por todas las calles feliz, esperanzado, verde, rodeado de girasoles, de amigos, de tranquilidad, así que cada mañana miraba la ventana y decía "que bonita es esta vida" mientras tomaba una taza de café colombiano, fue lo mejor fueron tres meses en el que mi cerebro se estaba preparando para una cambió total y empecé imaginar tigres y leones en el parque, oasis en medio de las carreteras así como las veía en las láminas bíblicas donde una familia jugaba feliz con un tigrillo y la mamá comía roscón con té con la mamá osa, perfecto ¿no?

Un caluroso domingo salí pensando que todo seguiría igual de bien como siempre y que ese día el panorama sería mucho más claro, al caer la tarde me dí cuenta que no, que esos osos y tigrillos nos podían comer en cualquier momento, así que decidí cogerlos a escobasos y cerrar la ventana de mi pieza con dos tablones inmensos para luego no llorar sobre los escombros en que se convertirán las montañas que se ven desde allí, de inmediato como si hubiera retrocedido tres meses atrás donde todo era incierto la voz volvió y me dijo " no parce abrase de acá" y pensé que esa era la mejor opción, salir corriendo y esconderme en una montaña, pero recordé que con lo que se avecina la montaña no es la mejor opción que en si la cosa sigue así en unos años seria más roja que verde, pensé en irme a vivir al mar, en lo más profundo, pero pensé, no allá no, ahí esta la "British Petrolium" y no soportaría un agua tan turbia con olor a petróleo. Después de mucho pensar vino a mi cabeza un lugar tranquilo donde la gente quiera cambio, donde pueda aportar y pensar libremente, así que se dibujo una isla del Caribe en mi cerebro y pensé "Puero Rico no puede ser, allá no son tan libres como se cree, y Cuba mucho menos, República Dominicana es demasiado caro y no s que aportaría allá", así que puse los ojos en el país de al lado, claro Haití, todo a punta a Haití un paraíso que necesita cambio y donde después del terremoto la gente se ayuda una a otra esperanzada en un país mejor y donde sueñan también en tomar té con los osos y peinar a los leones claro, ese es mi lugar así que busco desesperadamente ir a Haití, donde mi voz posiblemente sea escuchada y donde si haya un cambio real y donde la gente tenga sed de cosas nuevas.

No sé como irme para Haití y ruego por que la única forma de que Colombia quiera un cambio total no sea con un terremoto que según dice el vecino de la "CH" es por ensayar armas de destrucción masivas, espero que ese ensayo no sea cerca de Colombia, en fin, seguiré buscando la forma de llegar a Haití y correr en peloto como en el paraíso. Y como dice una reconocida filosofa "mientras tanto piensen en mí".

¡Por una generación menos deprimida!

Mi generación creció viendo televisión peruana estoy seguro que para todos los de mi edad es normal la palabra "pollada","chibolo" o representativas frases como "¡que pase la amante!" o "¡es un maldito señorita!", pero se que en el subconsciente colectivo de algunos colombianos también están mañanas y tardes llenas de "Karina y Timoteo", "Vacaciones con Parchis" y "El show del chavo" que rellenaban la programación de los canales peruanos y que realmente si pensaban en nosotros los "chibolos" de ese tiempo.
Somos una generación que creció deprimida, no por que hubiesemos comprendido modismos peruanos por que la "perubolica" nos haya obligado, no por eso no, somos una generación deprimida por que remojamos las galletas y el quesito en el agua de panela mientras veíamos la deprimente versión de "Pinocho" contada en las mañanas de "Vacaciones con parchis", recuerdo muy bien la escena en que pinocho se convirtió en burro, lloré a cantidades alarmantes; tanto así que mi agua de panela había perdido el sabor dulce que la caracteriza, pero comprendí que no me debía juntar con los que no me convenía.

La televisión peruana nos enseñó a comprender las telenovelas desde chicos,así que después de haber visto a nuestras mamas, primas o tías llorar con la telenovelas de las 4 de la tarde era nuestro turno llorar con la telenovela infantil que nos marcó, o al menos a mi me marco "Candy, Candy" una adorable huerfanita que vivía con la señorita Pony y la hermana María en el campo y que desde chica sufrió por de amor, la desdichada huerfana sufrió desde el principio pues su amado Antony murió tragicamente y sus malvados primos la odiaban por el dinero que había heredado ¿como olvidarla? ¿Como olvidar esa región al sur del lago Michigan donde vivía Candy?
mis ojos se llenan de lágrimas al recordar como Candy lloraba cuando se despedía desde el tren de Terry otro de sus amantes, por que algo que tenía Candy era amor para todos, seguro la dulce niña era bien candente en la intimidad por que todos andaban tras de ella. No, no puedo escribir más de Candy mis ojos se llenan de lágrimas y miro al infinito...eso si debo decir que Candy no solo me marco a mi, por que Gina una amiga del colegio llamó a su hijo "Antony" y aseguro que esta novela fue su inspiración.

Bueno creo que pasaría horas y horas escribiendo sobre los trágico dibujos que me dio la t.v peruana, también esta "Marco" que cada vez que lo veo en Youtube lloró a cantidades alarmantes y tomo mi agua de panela y dejo caer las lágrimas en ella para recordar el sabor de esos años maravillosos y de vez en cuando me asomo a la ventana para que mis lágrimas vuelen como volaban las de Candy cuando se despedía de sus amigos, amigas y amantes, y no puedo negar que en las noches abrazaba fuertemente a mi madre por que no quería que me abandora como lo hizo la madre de Marco y claro a no huir de casa sin permiso de mi papá por que me convertiría en un burro y una ballena me tragaría por que ademas estaba seguro que no habría un hada madrina azul, o no ser que no Noemí Sanín haya decidido aparte de ser el "Hada madrina de la cultura" en ser "el hada madrina azul de los niños colombianos".

Debo admitir que gracias a la televisión peruana mi generación es menos depresiva, por que esa energía la hemos botado en la infancia y la adolescencia. ¡Gracias Perú, por que mi generación es menos "EMO" que la anterior, por que gracias a ti fuimos un poco más consientes, tenemos espiritú mochilero como Marco, decimos mejores mentiras que Pinocho y hay chicas más zorras y lloronas que Candy!, Como hubiera deseado que mi hermano creciera viendo Candy o Marco, o señorita Laura, o vacaciones con parchis...en otras palabras Perú ¡sos como una madre para mi!


P.D. Pa'l recuerdo ...
http://www.youtube.com/watch?v=qDLm7-6Ge5M
http://www.youtube.com/watch?v=pZp_GUxkHLQ
http://www.youtube.com/watch?v=RV2qOXKJKAg

Me gusta mucho esta version de Pinocho que fue la que dieron en America t.v, nada que ver con disney!